diciembre 22, 2023

Reflexiones sobre el mundo del marketing y las ventas en este 2023.

· Trabajo en remoto.

 El debate que se abrió sobre el teletrabajo coincidiendo con la famosa carta de Elon Musk cuando compró Twitter ahora X, fue un debate vacío que no ha trascendido.

Desde mi punto de vista, quienes están a favor del teletrabajo tienen unos argumentos claros, mientras que quienes están a favor del trabajo en modo presencial, esgrimen argumentos como el control de los equipos que no son ciertos o en algunos casos se trata más de amortizar unas oficinas que se han quedado sobredimensionadas.

He trabajado en alguna empresa, donde tenían software de control de lo que hace cada usuario en su terminal y ni así haces que el que no está motivado trabaje, la estrategia va por otro lado, implicar al equipo y compartir objetivos.

A nivel personal, la conciencia general de que hay expertos en una materia que solo se nos puede contratar en remoto, me ha ayudado un mundo, en la actualidad aún viviendo en Ourense, trabajo para proyectos de Chile, EEUU, Barcelona, Valencia o Madrid y absolutamente nadie me pide reuniones presenciales.

Como casi todo en la vida, pasada la tormenta viene la calma y no conozco casi ninguna empresa que no permita a sus trabajadores trabajar dos o más días desde casa y según pasa el tiempo, se dan cuenta que teniendo el trabajo bien organizado esos días que le piden a la gente ir a la oficina no aportan ningún valor a la empresa.

· Inteligencia Artificial.

Imposible hacer un resumen de las cosas más destacadas del año sin hablar de ella.

A modo de resumen y siendo una opinión circunscrita a mi ámbito de trabajo, que son el marketing y las ventas, no hay un cambio tan radical como se esperaba. La ventas sigue tratando de dos personas que abren una relación de confianza para trabajar juntos.

Dos campos de influencia fundamentales:

La IA no visible.

Muchas de las herramientas que usamos en nuestro día a día, son más efectivas y sencillas de usar gracias a que han añadido una capa de IA en sus procesos, pero nosotros como usuarios no siempre somos conscientes de ello, pero si que tienen una incidencia directa en nuestro trabajo y en una mejora cuantitativa de los resultados.

· ChatGPT.

Se ha convertido en una asistente personal indispensable, yo ya le hago más consultas profesionales que a Google.

Una vez que he aprendido a generar los promts adecuados, me aporta un valor enorme, es como tener al tío más listo del mundo siempre disponible para echarte una mano.

· Sostenibilidad.

Durante muchos años la sostenibilidad no era más que una capa de pintura muy fina que algunas empresas se daban.

Pero hoy en día, ya comienza a ser un factor de compra decisivo para un número creciente de usuarios. Por lo que las empresas tienen que tomárselo en serio y no solo llega con mostrarse preocupados por la sostenibilidad si no que hay que tener políticas concretas para ser menos contaminantes.

· Cambios de modelos de consumo.

Fue uno de los efectos post pandemia, pero a diferencia de salir a los balcones para aplaudir, este vino para quedarse.

Buscamos más el vivir experiencias, que el poseer cosas.

Y este cambio de mentalidad, puede convertirse en una gran oportunidad para transformar sectores que son pilares de los modelos económicos de Occidente.

· Exceso de contenido y Tiktokación de LinkedIn.

Para una persona como yo enfocado al B2B, LinkedIn es seguramente la herramienta en la que más horas invierto, es fuente de conocimiento, de partners, de ideas, de inspiración, de entretenimiento y de clientes.

Pero desde hace unos meses, videos al estilo de TikTok que no me aportan nada me asaltan continuamente.

Este hecho, conjuntamente con demasiados contenidos repetitivos, cuando pasa algo trascendente, miles de usuarios lo comparten y acabas hasta el gorro de ver la misma publicación, hacen que esté en un proceso de «desamoramiento» de LinkedIn.

· Muy buen contenido en podcast.

Por otro lado, parece que el contenido de calidad que hecho en falta en LinkedIn, si lo encuentro en formato podcast.

Tengo una carpeta en Evernote, donde voy guardando aquellos contenidos que quiero escuchar, pero la carpeta crece y mi sensación de tarea pendiente también, por lo cual al final se acaba convirtiendo en algo negativo en vez de en algo positivo.

Me pasaba lo mismo con newsletter que me parecen interesantes, me suscribo pero me es imposible leer todo y lo que he hecho hace unos días, es darme de baja de la mayoría y dejar solo unas pocas que creo que son las más interesantes y las que más me pueden aportar.

Haré lo mismo con los podcast y he pensado en dejarme una par de horas a la semana fijas para dedicarlas a escuchar buen contenido. También aprovecho cuando voy a dar un paseo solo, para escuchar algún contenido.

Teletrabajando al 100%, considero esto algo fundamental porque te ayuda a estar al día y conectado con otras visiones.